Publicado en el número 149, correspondiente al mes de
agosto de 1990
En
los últimos días he tenido la oportunidad de leer el magnífico libro de Manuela
Asensio Rubio, titulado El Carlismo en la Provincia de Ciudad Real. A través de
su fluida narrativa, avalada por numerosas reseñas documentales, puede el
lector trasladarse mentalmente a la España del siglo XIX, desangrada por una
cruenta guerra civil entre los liberales, defensores de la reina Isabel II, y
los carlistas que aspiraban a que ocupara el trono alguno de los descendientes
de D. Carlos, hermano de Fernando VII, ya que no aceptaban la derogación de la
ley Sálica que impedía reinar a las mujeres.
Portada del libro |
Tras
estudiar detenidamente el texto, y degustar especialmente algunos párrafos que
hacen referencia a Manzanares, voy a permitirme corregir y ampliar un dato
aportado por la autora en la página 49, de cara a esclarecer dicho punto para
futuras investigaciones. El
párrafo, refiriéndose a las partidas carlistas que operaban por la zona del
Toboso, dice textualmente: (1)
En
septiembre de ese año se descubría que el comandante de la partida franca de
caballería D. José González Calero (a) Tronera, partidario de la causa
constitucional, colaboraba con los cabecillas facciosos Archidona, Veneno y
Pili. El primero permitía al jefe carlista Archidona que robase con todo
sosiego, mientras que él, por informaciones recibidas del cabecilla carlista,
aprehendía a pequeñas partidas facciosas. En un primer momento, se les condenó
a morir fusilados en Manzanares; pero en el último momento el general Narváez
suspendió la ejecución de la sentencia. A partir de ese momento, en la
documentación apenas se alude a ella. Posiblemente se desharía (la partida),
acogiéndose sus hombres a indulto.
Hasta
aquí llega la versión aportada por la Sra. Asensio, que en grandes rasgos toca
el asunto con acierto, exceptuando lo que se refiere a la suspensión de la
ejecución de los inculpados. Así, tras las pesquisas llevadas a cabo hábilmente
por Miguel Rodríguez Ferrer, ayudante del general Narváez, se descubrió la
traición del Tronera, siendo detenido junto a sus cómplices carlistas. Tas un
juicio sumarísimo, José González-Calero Martín, Tronera, natural de Manzanares,
de 36 años, hijo de Antonio y Quiteria, fue condenado a muerte por el delito de
traición a la causa isabelina. Por los robos y asesinatos perpetrados en la
comarca, corrieron la misma suerte sus aliados Luís Archidona, de unos 55 años,
y Juan Antonio Correas (a) Veneno, ambos naturales de Alcázar de San Juan, así
como Carmelo Parrera (a) Poli, natural de la villa de la Solana.
La
sentencia se cumplió efectivamente, al amanecer del día 27 de septiembre de
1838, en el patio del castillo de Manzanares, quedando reflejadas sus muertes
en el libro número 15 de Difuntos del Archivo Parroquial de Nuestra Señora de
la Asunción, apuntando como causa del fallecimiento: muerte violenta. (2)
Para
ampliar algunos datos de este suceso contamos con otro documento inédito,
escrito por el prócer republicano José María Rodríguez Medina a principios del
siglo XX, cuya minuciosa exposición permite suponer que tuviera acceso a algún
informe hoy desaparecido, o que le fuera relatado de viva voz por alguno de sus
antepasados directos. Paso a transcribir textualmente dicho documento, cuya
claridad no precisa mayor explicación. (3)
General Ramón María Narváez. Pintura de Vicente López |
Se
encargó Narváez de pacificar La Mancha e instala su Estado Mayor en Ciudad
Real, distribuye estratégicamente sus brigadas y, en conferencia íntima, se
llega a enterar que sus órdenes en Manzanares son cambiadas, que algún traidor
oculto procuraba retardar. De aquel pacto vergonzoso que él se suponía, resultó
ser autor Don José González Calero, alias el Tronera, que así el pueblo lo
conocía; era Comandante de Voluntarios Manchegos, escuadrón que operaba hasta
por Andalucía. En el pueblo era considerado como patriota, no presentían sus
falsas acciones ni felonía. Logró que indultaran a Veneno y Archidona, que
vivían ricos y tranquilos con sus familias, sin molestias, hasta que se
aclararon sus obras. Al enterarse Narváez de que estos cabecillas se habían distinguido
en maldad y asesinatos, en incendios e importantes robos, y que el fruto de sus
rapiñas mantenían escondido en sitios ignorados, y que habían actuado como muy
fieros carlistas, encarga a su ayudante, Miguel Rodríguez Ferrer, las activas
diligencias, formándoles sumario por tener convicción de que eran traidores. En
efecto, a los once días se rescataron cantidades y alhajas, pero ignoraba el
nombre del miserable ruin que los había traicionado. Continua Ferrer con
astucia sus pesquisas, logrando que Archidona se declare, acusando a Pili,
Veneno y Tronera de estar en compañía para repartirse el botín de todo lo
robado; consigue otro buen testigo para sus pistas, un sargento de la partida
de Ramírez, indultado, que dice que Tronera les facilitaba la huida para que
por sus tropas no fueran alcanzados, por lo que mucha parte del botín la
percibía, con lo que había un gran capital acumulado. Narváez vino desde Ciudad
Real a Manzanares e interroga al comandante Calero. El Tronera confiesa sus
delitos aportando atenuantes, por lo que mandan les formen consejo de guerra.
El tribunal condena a muerte a aquel traidor que intentó suicidarse con fino
cortaplumas, pero el médico la grande hemorragia le cortó; bajo las
formalidades de la rígida ordenanza a Tronera, Pili, Veneno y Archidona, por la
espalda, en veintisiete de septiembre, con otoñado sol, mil ochocientos treinta
y ocho, en día de gala, se formó el cuadro y, a los cuatro, los fusiló. Después
vence en la Calzada al célebre Orejita y, debido a su organización militar y
buen tacto, deshace con sus tropas a todos los cabecillas, Palillo, Bailando,
Mayorga, Cipriano y Serapio, con lo que dejó la Mancha limpia de carlistas.
J.M.R.
NOTAS
1.-
ASENSIO RUBIO, Manuela. El Carlismo en la Provincia de Ciudad Real. Página 49.
Biblioteca de Autores Manchegos. 1987.
2.-
Libro Registro de Defunciones nº 15, folios 136 y 137. Archivo Parroquial de
Nuestra Señora de la Asunción.
3.-
El documento original estaba en posesión de su hijo Juan Rodríguez Mengibar,
quien lo puso amablemente a mi disposición. Para esta edición el documento ha
sido retocado ligeramente a fin de mejorar su comprensión.
Buenas, Don Antonio
ResponderEliminarEn este BOE, puede Usted encontrar, la Causa, Sentencia y Aprobación, del Comandante del Escuadrón Franco de La Mancha, D. José González-Calero Martín (a) Tronera.
Un afectuoso saludo y Gracias, por sus trabajos.
http://www.boe.es/datos/pdfs/BOE//1838/1417/A00002-00003.pdf
Hola Jesús. Desconocía que se hubiera publicado el proceso y sentencia en el BOE. Sin duda mi paisano José María Rodríguez Medina se basó en ese boletín oficial para escribir el resumen que me entregó su hijo José María Rodríguez Menjíbar. Muy agradecido por la aportación. Cordial saludo.
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